Llevo tanto tiempo soñando con ese momento. El día en que te acercas y me dices "Venga, escapémonos. Sé que no tengo dinero, pero eso ahora no importa. Escapémonos a cualquier parte, los dos juntos. Tú eliges el camino." Y entonces subirme a tu moto y irnos lejos... Siempre fue mi sueño preferido.
Y aunque sé que nunca me dirás que me escape contigo, en tu moto, por Roma, mientras es primavera y yo llevo un vestido corto y una chaqueta vaquera, como el las películas. Aunque sé que nunca te gustará el café por el que yo me derrito, ni tampoco las chaquetas que me gustan a mi. ¡Ni nada! Eres completamente opuesto a mi! Pero a la vez tan idéntico. Cuando caminamos por las calles, por tarde que sea y me propones jugar a eso de no pisar los azulejos rojos, o los pasos de cebra. O cada mínima sonrisa tuya (aunque me repitas una y otra vez que no sabes sonreír.) que me hace sumergirme de nuevo en ese sueño que probablemente nunca se cumpla, pero no está de más ser feliz por los sueños, no pasa nada por salir de la cruda realidad e ir a tu propio mundo, de viajes en Vespas, de cafés italianos, y de chicos perfectos que se escapan contigo...
Pero cuando caes de la nube, y miras a la magnífica persona que tienes a tu lado, te das cuenta que no hace falta saber volar para hacerlo.
Ya sabes que dicen de los opuestos, a mi me gustan mucha de las cosas que te gustan a ti :) un beso
ResponderEliminares muy tierno lo que escribiste, me re lleno♥
ResponderEliminarMUCHÍSIMAS GRACIAS POR ESE COMENTARIO TAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAN GENIAL :) me animaste la tarde, bonita! :) xx
ResponderEliminarAmo tu texto.
ResponderEliminarHe de decirte que mi novio es italiano de Milán pero vive en Madrid desde que tiene uso de razón y en vacaciones se va para allá ( y muchas de las veces me lleva con él!)
y aun no he dado un paseo en Vespa por Milán, y me muero de ganas, lo reconozco.
Muchas gracias por seguirme.
Un besito grande